miércoles, 10 de agosto de 2016

La polémica del carril-bici

Se enfada y denuncia el PP que el gobierno municipal ha eliminado las huellas de su "gestión" sobre el carril-bici. Y sin cortarse un pelo, Martín Vila dice que lo que han hecho es borrar el "ridículo proyecto de rayas pintadas en el suelo".

La realidad es que el gobierno municipal peperiano nunca apostó con nitidez por un carril-bici en la ciudad, como denunciaba, antes de la última campaña electoral municipal la Plataforma carril-bici en Cádiz. Y es que en los veinte años de gestión de Teófila Martínez, solo se hicieron trozos de carril en zonas nuevas, como la avenida Juan Carlos I o el paseo marítimo de la barriada de la Paz, que tenían muchas deficiencias, como los bordillos no rebajados o la difícil, cuando no imposible, convivencia entre peatones y ciclistas, pues hay que recordar que la mayor parte del denominado carril bici gaditano era, efectivamente, rayas pintadas en la acera, de las que el modelo extremo es el siguiente:

Falta mucho por hacer para que Cádiz sea una ciudad adaptada a la bicicleta. No solo es necesario que se trace y desarrolle el carril-bici, falta también educación cívica y respeto entre ciclistas y peatones, sobre todo, respeto de los ciclistas a las calles peatonales.

Hay ciudades especialmente preparadas para la bicicleta. por ejemplo Gante, donde se pueden encontrar zonas de aparcamiento de bicis como el de esta foto:
Pero en Gante, por el centro histórico, los ciclistas van a paso muy lento, respetando a los viandantes.

Y en Münster, conocida como la ciudad de las bicicletas -se ven ciclistas de todas las edades y por todas partes-, la buena convivencia entre los peatones y ciclistas es absoluta, a lo que contribuye, sin dudas, la buena señalización de las zonas dedicadas a caminar o pasear en bici.


  

1 comentario:

Marc Georges Bugnard dijo...

Sería bastante ingenuo creer, que estas ciudades-bici que menciona, hayan simplemente pintado algunos carriles bici al suelo y ya. La cosa es más compleja.

El espacio para la bici, particularmente en los puntos claves (centro), se lo han ganado con disminuir la afluencia de coches. Esto lo han logrado con fomentar un transporte público que permite dejar el coche aparcado en la periferia y de moverse cómodamente y dignamente en el centro sin coche … al precio de cientos de millones en inversiones.

En Cádiz tuvimos estos cientos de millones para ese concepto de tráfico moderno, pero se les ha gastado en el segundo puente. Ese puente en sí es a su vez un concepto; uno que lleva más coches al centro y que exige más aparcamientos y más carreteras de acceso. … Todo lo contrario de lo que permitiría establecer carriles bici.

Pero el tema es un gran tabú. Tampoco esa Plataforma Carril-Bici, tampoco la Asamblea Ciclista Bahía de Cádiz, o tampoco tal grupo Izquierda Anticapitalista Cádiz nunca lo han mencionado, en todos estos años en que se pudo corregir ese desarrollo totalmente equivocado. ¿Cuantos ciudadanos disfrutan (de necesidad no se puede hablar) realmente de los 9 minutos que se gana al desdoblar el puente Carranza? Una mayoría accede desde San Fernando y otra mayoría se mueve solo dentro de la ciudad.

Se puede pretender el desafiar a los estudios y conceptos de tráfico moderno. Se puede decir, que las ciudades europeas que han fomentado el transporte público sean tontos, que les hubiera bastado con pintar carriles bici al suelo, que los gaditanos lo sabemos todo mejor. Pero con esto no se puede cambiar la realidad, la que solo menos coches liberan espacio en los centros y que más coches lo ocupan más. Aunque … en Cádiz se insiste con firmeza en lo contrario. También IU/Podemos.

No obstante hay también que ver lo positivo del nuevo puente: Todo el mundo nos envidia por ese puente. Hay una gran afluencia de visitantes que vienen solo para ver esta obra y que no paran de expresar su gran admiración por los gaditanos de tener esta magnifica obra. También los negociantes disfrutan de que la ciudad por fin sea liberada de su encerramiento. Los habitantes del casco antiguo no tienen más que “hacer media luna, pasando por el Carranza”, como dijo Teófila. U el abuelo en Astilleros, como escribía La Voz de Cádiz, puede visitar su nieta en Puerto Real en linea directa. Todos estos grandes beneficios hay que tenerles en cuenta.

Pero para la bici, lo lamento, existe un problema conceptual en Cádiz, una de las ciudades más compactadas y con menos espacio público en toda Europa.